España registró 9.708 nuevos procesos concursales en 2013, lo que supone un aumento del 15% frente a los registrados en 2012, según se desprende del seguimiento de las insolvencias judiciales que realiza el Área de Administración de Riesgos de Crédito y Caución, a partir de los datos publicados en el BOE. Destaca también que a lo largo de 2013 ha cambiado el prototipo de concurso de acreedores: pequeñas o medianas empresas de cerca de 20 trabajadores, con más de diez años de antigüedad, cada vez más presionadas por la prolongación en el tiempo de la crisis. El informe destaca que en línea con la previsible mejora de las condiciones económicas, el entorno de insolvencia empresarial también mejorará en 2014 de forma global, tras un 2013 marcado por el empeoramiento en muchos países.
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