«Volver
Los Presupuestos de 2014 congelarán el gasto de personal y las inversiones.
El ahorro derivado de la caída de la prima de riesgo no se destinará a inversión como piden las constructoras. Más allá de mantener el aumento del IRPF y continuar con la supresión de beneficios tributarios para las grandes empresas en el impuesto sobre sociedades, el Ejecutivo no aprobará grandes modificaciones tributarias en el Presupuesto de 2014. En el Ejecutivo
preocupa especialmente la situación de la Seguridad Social, cuyas finanzas han sufrido un deterioro sin precedentes desde el inicio de la crisis. En 2007, el conjunto de la Seguridad Social (que incluye pensiones, desempleo y Fogasa) presentaba un superávit de 13.681 millones. Solo cinco año más tarde, en 2012, acumuló un déficit de 10.131 millones